PARA LA VICE ”
LA ACCESIBILIDAD NO ES UN VALOR EN
TERMINOS DE SALUD” No hace mucho tiempo una serie de compañeros tuvimos la
ocasión de escuchar a la Viceconsejera de Sanidad, Olga Rivera. ” MINIVICEKRONIKA” Lo que más nos
sorprendió, además de que en todo momento estuvo con la sonrisa en la boca, fue
una afirmación sobre la accesibilidad al sistema sanitario, donde los tiempos
para acceder a una consulta o a una prueba complementaria y/o a una
intervención quirúrgica no son ítems de valoración de la calidad del sistema,
lo que realmente aporta valor al sistema sanitario es la calidad de vida y el
nivel de salud de la población.
Pues bien esta afirmación, que con una sonrisa sospechosa
hasta sonaba bien, esconde la realidad del día a día en nuestro sistema. Ahora
resulta que el ciudadano no se tiene que preocupar por el tiempo que se tarda en el diagnóstico
de su problema, por el tiempo en el acceso a una prueba o a una intervención
quirúrgica, etc. Efectivamente, nos vienen a decir: señor ciudadano no se
preocupe de cuando y como le vamos a tratar, que nuestro modelo de prestación
sanitaria le dará la solución global a su problema y le reportará valor a su
salud. Y todos tan contentos, algo así como “la estrategia os hará más sanos”.
Nuestro consejero, mister Kronikoman, cuando acudió al
Consejo Interterritorial, además de posicionarse en contra únicamente de uno de los
recortes, manifestó que hay que cambiar de modelo, como así se está haciendo en
Euskadi y aplicar el modelo de KróniKos. Dichas palabras no hacen más que
corroborar que todos los “huevos” (todos los problemas), hay que ponerlos en la
cesta del “modelo”. Los problemas económicos del Sistema Español de Salud en Euskadi los
solucionamos con la “estrategia de KróniKos” y se queda el tío tan tranquilo , “!manda huevos!” decimos nosotros.
De esta manera, la Estrategia de kronicidad de Euskadi
capitaliza todo en el mundo sanitario y en el mundo de la comunicación. Ahora
en los medios solamente existe las consultas a distancia, las llamadas tele
consultas, el consejo sanitario telefónico, el seguimiento a través de las
nuevas tecnologías, el paciente activo y un montón de “nuevas” formas de prestar la sanidad. En definitiva,
unaestrategia GLOBO que solo contiene humo para esconder las miserias de la verdadera realidad de
nuestro sistema.
Y
la realidad de todo esto se traduce en que si no se informa a la ciudadanía de
las listas de espera, el problema no existe. Debemos denunciar la situación
actual del ciudadano. Ya no solo las esperas quirúrgicas, sino el propio acceso
al médico de cabecera. Para empezar, llamar al centro de salud es toda una
odisea, según manifiestan los pacientes. Me imagino la situación, ya que la
sufrimos todos cuando llamamos a nuestro operador de telefonía, para que al
final no se consiga consulta y se tenga que acudir a las urgencias
hospitalarias. Señor kronikoman, este no es el modelo “sostenible” que nos
comenta.
Pues
bien, ya me ha recibido mi médico de cabecera y supongamos que la gravedad de
mi situación requiere la consulta al especialista. A partir de aquí empieza la
tierra oscura, el que le llamarán, el modelo del “buen gobierno”, el de no se
preocupe que nuestra estrategia le sanará. Dejemos los documentos de derivación
en un cajón, a ver si así los problemas sanitarios de la población se sanan por
si solos. No se preocupe ciudadano, que esta actuación no produce “valor” en
términos de salud, como decía la risueña minivicekronika.
El
problema no acaba aquí, si existe algún modelo trasparente en el sistema, pues
se sustituye por el modelo del cajón, que es más “sostenible”. No hay mejor
sostenibilidad que no hacer nada. Y esto es lo que ha pasado con el modelo del
hospital Santiago. El ciudadano antes de salir de su centro de salud ya
disponía de una fecha para ser visto por su especialista, de la misma manera el
ciudadano antes de salir del hospital disponía de un documento en que figuraba
la fecha de entrada en las listas de espera quirúrgica.
Los
nuevos gestores del hospital virtual están impulsando la opacidad, implantando
el nuevo modelo INSALUD años 80. Si como bien dice la minivicekronika. que
tenemos que trabajar en términos de valor, pues efectivamente, se hace
desaparecer las esperas no dando acceso a los centros de salud para consultas
de especialistas y no dando información al ciudadano de, al menos, cuando entra
en la listas de espera, que estas actuaciones además de no producir valor en
términos de salud, dan mucha inquietud al ciudadano.
Es
hora de exigir a nuestros dirigentes una verdadera transparencia en nuestro
sistema, debemos colocar al ciudadano en el centro del sistema, pero de verdad.
Que no nos sustituyan por un modelo GLOBO, que los problemas se dan en el día a día
entre médico y paciente. Una cosa es la planificación y otra bien distinta es
la consulta para atender al ciudadano, es el mundo real, es la transparencia.
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